Por: karol Yulieth Lopéz león

El mundo de la gimnasia artística se detiene ante Ángel Barajas. El prodigio colombiano no solo se ha clasificado a dos finales en el Mundial de Indonesia 2025, sino que está a las puertas de un podio histórico, dejando a todos boquiabiertos con su destreza. ¿Será este el inicio de una leyenda?

Desde Indonesia, la élite de la gimnasia mundial es testigo de un fenómeno emergente: Ángel Barajas. El talentoso gimnasta colombiano ha sacudido el Campeonato Mundial de Gimnasia Artística FIG 2025 con actuaciones que desafían las expectativas. Su presencia en dos finales mundiales ha capturado la atención global, posicionándolo como una de las figuras más fascinantes del certamen. Se habla de un antes y un después para el deporte colombiano.

Barajas se ha consolidado entre la crema y nata de la disciplina, codeándose con gigantes como el chino Zou Jingyuan y el japonés Oka Shinnosuke en Barras Paralelas. Su quinto lugar en la categoría All Around, con 80.664 puntos, lo sitúa firmemente entre los seis mejores del planeta. Expertos murmuran sobre su serenidad y técnica impecable, características raras en talentos tan jóvenes bajo tanta presión. El mundo entero espera ver si su ascenso meteórico continuará.

La proeza de Barajas no se limita a las finales ya aseguradas. Estuvo a un suspiro de lograr una tercera final en Barra Fija, ocupando el 9° lugar y quedándose a tan solo 0.033 puntos de la clasificación. Esta muestra de versatilidad subraya su potencial ilimitado en un deporte donde la precisión es primordial. Ahora, todas las miradas se posan en el miércoles, día crucial para sus aspiraciones de podio.

La posible consecución de un podio mundial no sería solo un hito para Ángel Barajas, sino una gesta sin precedentes para Colombia en la gimnasia artística. Este logro podría inspirar a una nueva generación de atletas, impulsando el desarrollo del deporte en la región. Su impresionante desempeño ya lo ha erigido como un embajador de la excelencia deportiva, demostrando que la pasión y el talento no tienen fronteras. Sin duda, su nombre ya resuena fuerte en los anales del deporte mundial.