Por: Katherine Cruz

El Concejo de Neiva arde en debate: ¿un nuevo megaestadio privado o la resurrección de su icónico recinto? Millonarias inversiones y visiones contrapuestas sacuden la ciudad.

Este martes, el Concejo de Neiva fue escenario de un encendido debate que podría redefinir el paisaje deportivo y urbano de la ciudad. La discusión se centró en dos propuestas monumentales: un ambicioso estadio privado y la crucial reconstrucción del histórico Guillermo Plazas Alcid. Neiva se encuentra en una encrucijada, buscando equilibrar el desarrollo con la sostenibilidad ambiental y la planificación a largo plazo.

El empresario Felipe Olave presentó su visión de un nuevo estadio en Isla Santorini, prometiendo sostenibilidad, inversión privada millonaria y miles de empleos. Olave insistió en que su proyecto 'Mirador del Magdalena', con lanzamiento el 13 de noviembre, no compite con el municipal, sino que complementa el desarrollo turístico y cultural. Sin embargo, concejales como Juan Sebastián Prieto demandaron estudios técnicos y ambientales rigurosos antes de cualquier avance, mientras Cristian Bautista defendió la rehabilitación del Guillermo Plazas Alcid, recordando su endeudamiento de 28 mil millones de pesos.

La sesión reveló la profunda división de opiniones en el seno del Concejo. Mientras que Jesús Garzón, Camilo Perdomo y Lina Guzmán mostraron apertura a proyectos sostenibles, la voz de la precaución se hizo sentir. El concejal Roberto Escobar enfatizó que la viabilidad de cualquier nueva construcción pende del Plan de Ordenamiento Territorial, cuya actualización no verá la luz hasta 2027, y de las decisiones inapelables de la autoridad ambiental.

La disputa de los estadios en Neiva no es solo una cuestión de infraestructura, sino un pulso entre la visión de inversión acelerada y la urgencia de una planificación urbana integral. Concejales como Alejandro Serna, Humberto Perdomo y Héctor Javier Osorio clamaron por proteger el Parque Isla como pulmón verde y asegurar la sostenibilidad financiera municipal. La decisión final, que integra transparencia, ambiente y finanzas, será vital para definir si Neiva avanza hacia un futuro caótico o una prosperidad planificada y duradera.