Por: Bryan Steven Cardona Ciceri

El Atlético Huila Sub-15 ha sellado su pase a la final del Campeonato Nacional Interclubes, tras un vibrante empate 2-2 ante Cúcuta en casa y una decisiva victoria de visita. La emoción se desborda en Neiva.

El fútbol formativo colombiano vivió momentos de pura adrenalina con la clasificación del Atlético Huila Sub-15 a la ansiada final del Campeonato Nacional Interclubes. Este hito deportivo representa un logro significativo para la cantera opita, que demostró carácter y determinación en la instancia semifinal. La afición celebra con fervor el prometedor futuro de sus jóvenes talentos en el panorama nacional.

Los jóvenes futbolistas del Atlético Huila, dirigidos con maestría, fueron los grandes protagonistas de esta gesta. Su compromiso y entrega en cada minuto del campo reflejaron una madurez sorprendente para su edad. Por otro lado, el Cúcuta Deportivo también mostró un nivel competitivo formidable, exigiendo al máximo a los huilenses hasta el pitido final. Este enfrentamiento dejó claro el talento que emerge en el balompié nacional.

La llave semifinal se decidió en dos emocionantes encuentros que mantuvieron a todos al borde de sus asientos. En el partido de ida, disputado en territorio nortesantandereano, Atlético Huila sorprendió con una victoria crucial de 2-1, sentando las bases de su clasificación. Luego, en la vuelta celebrada en la sede deportiva del club en la vía a Rivera, los prejuveniles supieron administrar la ventaja obtenida, culminando el encuentro con un empate 2-2 que les fue más que suficiente para asegurar su lugar en la final. Ambos equipos ofrecieron un espectáculo de ritmo intenso y alternancia en el dominio del juego.

Esta clasificación es el fruto de un trabajo arduo y una estrategia bien definida, donde la cohesión del equipo prevaleció en momentos de alta presión. El Atlético Huila ahora se posiciona como uno de los referentes en la formación de talentos a nivel nacional en esta categoría. A la espera de conocer a su contendiente final, el equipo se prepara para disputar el título, soñando con levantar el trofeo más codiciado del fútbol juvenil. Este logro no solo impulsa a los jugadores, sino que eleva el perfil de la institución en el desarrollo deportivo.