martes, 2 diciembre 2025
Por: karol Yulieth Lopéz león
Un evento sin precedentes en Pitalito ve a la Procuraduría de Garzón descentralizarse, llevando el control a 24 municipios del Huila. Felipe Hernández lidera este movimiento audaz, prometiendo una era de vigilancia cercana y efectiva.
El 2 de diciembre de 2025, la remota Pitalito, Huila, fue testigo de un acontecimiento institucional que podría redefinir la supervisión pública en Colombia. La Procuraduría Provincial de Instrucción de Garzón, en un giro audaz y sin precedentes, convocó a 24 personeros municipales del centro, sur y occidente del departamento a un crucial Encuentro Institucional y Académico. Este movimiento estratégico marca el inicio de una nueva era para el Ministerio Público, que busca despojarse de su imagen distante y centralizada. La jornada promete ser el primer paso hacia una entidad verdaderamente arraigada en el territorio.
A la cabeza de esta iniciativa transformadora se encuentra el procurador provincial Felipe Hernández, quien ha impulsado una estrategia radical para "sacar la entidad al territorio". Hernández declaró enfáticamente: "Esa responsabilidad no puede ejercerse desde un escritorio, debe ejercerse en el territorio, escuchando a los personeros y entendiendo sus realidades". Su visión es clara: fortalecer la articulación con los personeros y consolidar una Procuraduría más activa y cercana a las dinámicas municipales. La presencia de figuras como el contralor departamental electo, Wilson Díaz Sterling, subraya la relevancia de este histórico cónclave.
Durante esta jornada académica intensiva, se abordaron temas de vital importancia que resuenan en cada rincón de la administración pública. Desde delitos y faltas contra la administración hasta la responsabilidad fiscal y disciplinaria, la agenda fue diseñada para empoderar a los personeros en su rol de guardianes de la ética. El evento también exploró el fortalecimiento del Ministerio Público municipal y los retos actuales de la función pública en municipios descentralizados. La elección de Pitalito, en el corazón del sur del Huila, no fue casual, enviando un poderoso mensaje de inclusión y atención a zonas históricamente desatendidas.
Este encuentro es una declaración contundente: la Procuraduría Provincial de Garzón no solo retoma, sino que reinventa su rol territorial con un enfoque en la prevención y el acompañamiento. Hernández sentenció: "Hoy demostramos que la descentralización no es un concepto, sino una práctica". Los personeros, visiblemente impactados, aplaudieron ser convocados a un espacio técnico en su región por primera vez en años, reconociendo la urgencia de fortalecer la coordinación institucional. Este audaz movimiento podría ser el presagio de una ola de transparencia y rendición de cuentas que sacudirá los cimientos de la burocracia en todo el país.
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