Por: Katherine Cruz

¡Victoria rotunda! En una operación relámpago en Huila, fuerzas de seguridad liberaron a nueve mineros y un menor, secuestrados por meses. Millonaria extorsión y criminales en la mira.

En la mañana de este viernes, un impactante operativo conjunto sacudió la vereda San Miguel de La Plata, Huila, culminando con la liberación de nueve mineros de Antioquia. Las víctimas, que permanecían cautivas desde el 17 de octubre, fueron rescatadas en una acción coordinada por tropas de la Fuerza de Despliegue Rápido N.° 5 del Ejército, el Gaula de la Policía y la Fiscalía General de la Nación. Este rescate pone fin a meses de incertidumbre y angustia para las familias afectadas.

Los captores, vinculados a la Subestructura Hernando González Acosta del Bloque Central Isaías Pardo, exigían una cifra exorbitante: cerca de 5000 millones de pesos por la libertad de los mineros. Además de los adultos, en la misma maniobra fue recuperado un menor de edad, quien habría sido víctima de reclutamiento forzado y presunto maltrato. Este hecho subraya la crueldad de las organizaciones criminales que no dudan en vulnerar los derechos de los más jóvenes y vulnerables.

La operación permitió la captura de alias Richard o Cristo, señalado como integrante clave de la mencionada subestructura y presunto autor material del atentado con explosivos del 18 de abril en La Plata. Junto a él, otro sujeto fue detenido, desmantelando parte de la red criminal responsable de la violencia en la región. Las autoridades incautaron dos armas de fuego, un artefacto explosivo improvisado, munición de distintos calibres y equipos de comunicación, elementos cruciales para sostener su actividad ilícita.

La liberación de los secuestrados, las importantes capturas y la recuperación del menor representan un golpe devastador a la estructura financiera y operativa de esta organización ilegal. Esta contundente respuesta de la Fuerza Pública reafirma su compromiso inquebrantable en la lucha contra el secuestro, la extorsión, el terrorismo y el reclutamiento forzado. Es un mensaje claro sobre la protección prioritaria de la población civil frente a estas amenazas persistentes y brutales.